viernes, 30 de abril de 2021

 A partir de la lectura de Garcés, sobre el estado de la educación actual y sus referencias filosóficas para tratar de explicar lo inexplicable de la situación educativa actual, me han venido algunas preguntas a la cabeza...¿qué tipo de futuro les presentamos a aquellos que actualmente están en una edad de máximo esplendor psicobiológico? ¿Cómo puedo tratar de convencer a mis alumnos adolescentes de que todo irá bien si la incertidumbre dominante es excesiva? ¿Hasta dónde las estrategias de dominación y profilaxis van a seguir rigiendo nuestra realidad cotidiana? ¿Cómo ofrezco algún tipo de esperanza a quienes se están formando hoy en futuros ciudadanos y trabajadores? ¿Qué narrativa esperanzadora  me invento para aquellos que esperan encontrar un camino formativo como vía de inserción al mundo laboral y social actual? Son muchas preguntas que engrasan la maquinaria de mi neurosis, de la que también estoy hecho.




martes, 27 de abril de 2021

  Ojeando en una librería en este mes de los libros, cayó en mis manos casi literalmente un ejemplar del texto de Marina Garcés titulado Escuela de aprendices. Era obvio que llamó mi atención y, como suelo hacer, abro por cualquier página el libro y encuentro: 

"(...) en pocos lugares me he sentido por momentos tan viva como en un aula. Porque interrumpe la vida, el vacío que abre puede ser cualquier cosa:mil mundos por descubrir o una sala de tortura, el lugar para la amistad y la admiración o para el miedo y la violencia, un espacio de tiempo para el recogimiento o un pedazo de vida insoportable."

Finalmente se vino a casa este maravilloso texto. Un texto que hace recuperar la fe en quien observa desde su conocimiento filosófico hacia la educación. Una educación que lejos de ser activa, naturalista, lenta, genuina, institucionalmente está siendo cómplice de las estrategias políticas basadas en el temor y el sometimiento. En pocos lugares tendría cabida la metáfora de La Vida es Bella como en una escuela en estos tiempos tan complejos y difusos. ¿Porqué no atrevernos a buscar esa paradoja? ¿Porqué no proponer a los alumnos la posibilidad de transformar la realidad? ¿Porqué no respetar su momento evolutivo, su ingenuidad, su infancia y ofrecerles el juego como evasión y creación de su entorno? Porque requiere trabajo, y estamos tan pendientes de la eme con la a: ma...que olvidamos la propia ilógica de la vivencia pandémica cotidiana. 



Resposabilidad 0

Me siento aturdido ante tanta hipocresía que maman nuestros alumnos, hijos, sobrinos, nietos... Las aulas están llenas de personas que me mu...